No es fácil definir la ruta

Cuando uno corredor piensa si va a correr un maratón o no, tiene acceso a datos que le permiten pensar si se inscribe o no.  Las páginas web de los maratones ofrecen toda la información necesaria: ruta, perfil de elevación, temperaturas promedio, puntos de suministro de agua, geles y bebidas isotónicas, etc.

Pero cuando uno corre virtualmente, no hay nada de eso.  Uno debe planearlo todo.

Photo by Christina Morillo

Primero que nada, está la ruta.  La solución fácil sería correr en un parque grande pero, ¿realmente puede uno meter 42 kilómetros en ese parque sin que uno arriesgue la monotonía o perder la cuenta de cuántas vueltas lleva uno?  Vamos a un extremo: imaginen elegir correr en una pista de atletismo de 400 metros.  Un maratón requeriría poco más de ¡105 vueltas!  ¿Cómo contarlas de forma precisa?

Luego está la logística de la ruta.  Sobran los memes de corredores donde el baño es un tema serio. El escenario ideal es haber sacado todo del organismo antes de la carrera. Y si se puede en casa o en un baño "de confianza", mucho mejor.  Pero eso no es garantía que uno tenga que hacer una escala técnica en plena carrera.  En un maratón, hay baños cada 3 o 4 kilómetros pero, en un maratón virtual no los hay.  Así que la ruta debe considerar la posibilidad de "escalas técnicas".  

Luego está la hidratación y nutrición.  Generalmente uno carga sus geles y alguna que otra barra de energía, ya sea maratón tradicional o virtual.  Pero pude ver a algunos corredores que se organizaron con sus familiares para que les entregaran suministros extras (más geles y hasta una pila externa) a media carrera.  En un maratón virtual es posible recibir esa ayuda, pero hay que elegir una ruta donde uno pueda recibirla.  Pero la hidratación es el problema.  En un maratón hay puestos con agua y bebidas isotónicas cada 2 kilómetros aproximadamente. No es necesario cargar con agua. Pero en un maratón virtual, uno tiene que cargar su propia agua o encontrar la forma de tener puntos de suministro en plena ruta (ya sea tiendas o que conocidos estén esperando en puntos previamente acordados).

El clima puede convertirse en otro factor.  Una ruta lejos de casa en un día lluvioso implica que uno tendrá que cargar con alguna chamarra para no enfriarse de más al finalizar la carrera.

Finalmente, está el tema de lesiones. En un maratón hay servicios médicos a lo largo de la ruta. Además, hay gente alrededor que puede llamar a una ambulancia si fuera necesario.  Pero en una carrera virtual no hay garantía que haya gente que pueda prestar ayuda, sobretodo si la ruta va por caminos rurales o lugares con poca gente.

Platicando con otros corredores descubrí que eligen entre tres tipos de rutas:

  1. Una ruta urbana pasando por varios puntos de suministro que pueden ser tiendas y centros comerciales o casas de conocidos para usarlos como puntos de suministro o para "escalas técnicas".
  2. Una ruta que inicie en casa, pase varias veces por casa (o un punto central de suministro), permitiendo "escalas técnicas" o de suministro a lo largo del camino y termine nuevamente en casa.
  3. Una ruta rural con conectividad de celular por si hubiera una emergencia, y donde el corredor puede compartir con su familia su ubicación o la hora esperada para completar la ruta. Esta ruta implica que, si la naturaleza llama, habrá que hacer las cosas "de aguilita".

Esta información me ha ayudado a pensar en alguans opciones.  Tengo ya identificadas rutas que inician y terminan en casa. Una donde necesitaría me lleven a un punto alejado de casa (para terminar en casa) y otras donde tendría que ir a otra ciudad a correr.  Honestamente, no sé cuál tomar pero creo la mejor decisión será la que tenga más información. Y para ello hay que esperar a ver como pinta el clima ese día.

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